1. Protección limitada para tu propio vehículo:
La Responsabilidad Civil Extracontractual se enfoca principalmente en cubrir los daños a terceros en caso de un accidente en el que seas considerado responsable. Sin embargo, deja desprotegido tu propio vehículo. Si este sufre daños o pérdida debido a colisiones, robos, incendios u otros eventos, tendrás que afrontar los costos de reparación o reemplazo por tu cuenta.
2. Sin cobertura para accidentes sin terceros involucrados:
Imagina estar involucrado en un accidente sin la presencia de otros vehículos. Con solo Responsabilidad Civil Extracontractual, no contarás con cobertura para los daños a tu auto en estas situaciones. Esto puede resultar en gastos considerables si tu vehículo sufre daños por eventos como vuelcos, caídas o colisiones con objetos fijos.
3. Ausencia de protección en caso de robo o vandalismo:
Si tu automóvil es robado o sufre vandalismo, la Responsabilidad Civil Extracontractual no brinda cobertura. Estos eventos pueden tener un impacto financiero significativo, ya que serás responsable de cubrir los costos de reparación o reemplazo, así como de las pérdidas asociadas.
4. Sin asistencia en caso de eventos naturales:
Eventos naturales como inundaciones, tormentas o caídas de árboles pueden causar daños considerables a tu vehículo. Al tener solo Responsabilidad Civil Extracontractual, carecerás de la protección necesaria para enfrentar estos escenarios, dejándote expuesto a costosos gastos de reparación.
5. Falta de cobertura para gastos médicos personales:
En caso de un accidente que cause lesiones a ti o a tus pasajeros, la Responsabilidad Civil Extracontractual no cubre los gastos médicos personales. Esto significa que deberás asumir los costos de atención médica, rehabilitación y otros gastos relacionados con lesiones.
Conclusión: Si bien la Responsabilidad Civil Extracontractual es una obligación legal y esencial, es fundamental reconocer sus limitaciones. Optar solo por esta cobertura puede dejar importantes aspectos de tu seguridad financiera desprotegidos. Evalúa cuidadosamente tus necesidades y considera la posibilidad de agregar coberturas adicionales para garantizar una protección integral para ti y tu vehículo. La clave está en encontrar el equilibrio adecuado entre la obligación legal y la seguridad personal en el camino.